Proyecto: La Fábrica
Cliente: Grupo La Fábrica
Localización: Centro Comercial Westfield Parquesur, España
Superficie terraza: 90.00m²
Superficie interior: 170.00m²
Uso: Restaurante
Fecha final de obra: Noviembre 2023
Arquitecto: Pablo Baruc
Colaboradores: CM4, María José Ferreira, Rocío Curto
Mobiliario: Servitel / Paulaner
Iluminación: Faro BCN, Dajor
Carpintería: Metalistería Ayuso, Jiménez Carpinteros
Fotografía: Fernando Alda
Proyecto de interiorismo para el restaurante La Fábrica
Identidad cervecera en un ambiente acogedor
En esta ocasión el estudio de arquitectura Pablo Baruc ha realizado un proyecto para La Fábrica, un restaurante con una imagen muy arraigada a la producción de cervezas. El objetivo del proyecto de interiorismo consistía en crear un ambiente acogedor sin olvidar la identidad propia de La Fábrica con su carácter industrial. Además, la colaboración con Paulaner, una marca destacada en la industria cervecera, añadió una capa única al proyecto, aportando elementos singulares de mobiliario y rotulación que refuerzan la conexión con la esencia del producto.
Dos conceptos en un solo proyecto de interiorismo
El restaurante La Fábrica se encuentra dividido en dos espacios claramente diferenciados. Uno de ellos, con acceso desde el interior del Centro Comercial, cuenta con una fachada que se convierte en el umbral hacia una experiencia gastronómica única. El otro espacio, una terraza exterior, se vincula al amplio espacio abierto central, adornado por un pintoresco lago. La división física de estos espacios no ha sido un obstáculo para el estudio de arquitectura e interiorismo Pablo Baruc, más bien una oportunidad para que el diseño mantenga una identidad coherente, integrando ambos ambientes en un solo concepto.
Intimidad y juego de luces en el interior de La Fábrica
En el interior del restaurante, se ha creado un ambiente íntimo donde la iluminación indirecta despierta sensaciones acogedoras. La presencia de elementos industriales, como instalaciones y un mobiliario que combina metal, madera y tapizados, define la estética interior. El techo original, de forjado bi-direccional con casetones, se mantiene expuesto, unificando visualmente todas las instalaciones mediante una capa de pintura negra mate. El contraste con la iluminación técnica de lámparas de chapa perforada y las luces escénicas de neón, crea una atmósfera única que combina lo industrial con lo cálido.
Naturaleza y elegancia en el exterior del restaurante
Respecto al exterior, la terraza busca mantener la coherencia estética, pero con un carácter más abierto. La presencia de vegetación, rafia y trenzados de cuerda conecta este espacio con la naturaleza. El mobiliario exterior combina tableros fenólicos y mármoles bicolor, con sillas y sofás tapizados que invitan a disfrutar del entorno. Una lona retráctil de color azul intenso, con finas rayas blancas, cubre el área y, junto con los ventiladores de madera, crea un clima acogedor que invita a disfrutar del producto al aire libre.
Este proyecto de interiorismo no sólo transformó el espacio físico, sino que también llevó consigo un cambio de imagen para el Grupo. La simplificación del concepto buscó actualizar la identidad, adaptándola a las tendencias contemporáneas. Los tonos neutros en los acabados contrastan con una iluminación que juega con cálidos contrastes y neones rojos y amarillos utilizados en la señalética y rotulación, creando una experiencia visualmente impactante.
El proyecto de interiorismo para el restaurante La Fábrica, liderado por el estudio de arquitectura Pablo Baruc, es un testimonio de la habilidad para fusionar identidad de marca, funcionalidad y estética en un solo espacio. La conexión entre lo industrial y lo acogedor, la integración armoniosa de dos espacios diferenciados y la atención meticulosa a los detalles hacen de este restaurante un ejemplo brillante de la innovación en el diseño arquitectónico.
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