Proyecto de reforma e interiorismo para un apartamento en Sanlúcar de Barrameda

Primar el confort y la calidez familiar es lo que hemos conseguido en este proyecto

El encargo debe resolver un programa básico de segunda residencia para una familia joven con niños, combinando las necesidades de ser práctica para la familia, con el confort de recibir invitados puntualmente.
El apartamento de dos dormitorios originalmente no prestaba muchas opciones de redistribución en la zona de dormitorios y baño por su limitada superficie, pero en la zona de entrada, cocina y salón-comedor se ha pretendido organizar con un concepto más contemporáneo de espacios abiertos, y relacionados. Se propone un recorrido de distintas atmósferas interrelacionadas por conexiones visuales y la propia continuidad de materiales.
La entrada se resuelve con un gran panelado de madera de nogal de suelo a techo, que da calidez y oculta el mueble cocina, y divide los espacios de cocina, salón y entrada. Un suelo porcelánico recorre desde la entrada, hasta salón, pasillos, comedor y recubre las paredes de cocina y baño. Dicha entrada esta iluminada únicamente por una lámpara de pie en esquina, y un led sobre el panelado de pared, aumentando así los contrastes de materiales.
El salón comedor mantiene parte del panelado lacado en pared de la recepción tras el sofá y junto a la mesa comedor, contrastando con las maderas cálidas de cocina y mueble de televisión. Iluminación puntual sobre mesa baja con lámpara de pie, y sobre mesa comedor con lámpara descolgada. Ambiente acompañado con un led indirecto en el foseado perimetral del techo, que oculta los mecanismos de oscurecimiento. Las hornacinas con vidrio oscuro y led interior matizan y dan profundidad a todo el mobiliario.
Todo el acceso a dormitorios se sectoriza con un distribuidor oculto con puertas paneladas, que intentan ampliar los reducidos espacios, que se iluminan completamente con luz indirecta lineal. Los dormitorios se sencilla distribución y acabados combinan los tableros lacados con panelados de palillería de roble natural, potenciado con un baño de luz, creando un ambiente propio de dichas estancias. El dormitorio principal dispone de un armario panelado que continúa la estética general, y se iguala a los acabados de cabecero y mesitas de noche.
El segundo dormitorio se resuelve con una litera en dos anchos, con cama baja de 90cm y cama alta de 130cm, pensando en la versatilidad de la vivienda para familia o invitados.
Finalmente el baño pretende sorprender contrastando entre a zona de baño que se resuelve con el mismo porcelánico del suelo, y la zona de lavabo que recupera la madera utilizada en dormitorios. Creando así en el espacio más reducido del apartamento un plus en calidez y sorpresa. Buscando la abstracción el lavabo se propone como pedestal escultórico recubierto en el mismo material antes usado de tablero laminado antihuella.
El concepto de interiorismo se ha basado en la continuidad de pocos materiales, elegidos para generar calidez, y confort. Continuidad contrastada por materiales como maderas naturales, laminados, lacados, piedras, cerámicas y entelados. El proyecto manteniendo las necesidades prácticas de una vivienda familiar pretende generar una continuidad, con contrastes armónicos entre espacios y texturas, acompañados con una iluminación que potencien el confort.

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